Cinco errores médicos comunes de los cirujanos de Los Ángeles

Cada año, pacientes del área de Los Ángeles sufren errores médicos que provocan lesiones graves. A nivel nacional, un Estudio de Práctica Médica de Harvard estima que, cada año, más de 180.000 personas mueren a causa de errores médicos. Desafortunadamente, para miles de pacientes cada año en Los Ángeles, las operaciones terminan en lesiones, discapacidad, dolor, trauma emocional y, a veces, la muerte. Algunas complicaciones quirúrgicas son imprevisibles e inevitables. Sin embargo, otras se derivan de la negligencia, el descuido, la mala planificación o la distracción de los profesionales médicos. Cuando usted entra en un quirófano, tiene que confiar su vida a un cirujano. Si usted o un ser querido ha resultado lesionado por un error de un médico, es posible que necesite la ayuda de un abogado especializado en negligencias médicas de Los Ángeles.

Los errores médicos y quirúrgicos más comunes en los hospitales y consultorios médicos de Los Ángeles son los siguientes:

1. Errores de anestesia: La anestesia puede ser el aspecto más peligroso de una operación. El anestesista puede no hacer una historia clínica adecuada del paciente o no informar debidamente de las restricciones de comida, agua y alcohol antes de la operación. Durante la operación, el anestesista puede administrar una cantidad incorrecta de anestésico, descuidar la vigilancia de las constantes vitales del paciente o utilizar dispositivos médicos defectuosos.

2. Daños derivados de una técnica quirúrgica deficiente: Si un cirujano utiliza las herramientas sin cuidado, los resultados pueden ser desastrosos. Un resbalón del bisturí, el láser u otro instrumento quirúrgico puede dar lugar a órganos perforados, membranas perforadas, nervios seccionados, hemorragias internas o infecciones. En algunos casos, un cirujano negligente puede dejar herramientas o restos en el paciente, realizar una intervención quirúrgica equivocada o incluso realizar la intervención en la parte equivocada del cuerpo.

3. Errores de medicación: Según un estudio reciente, los pacientes que se someten a una intervención quirúrgica tienen tres veces más probabilidades de sufrir daños por errores de medicación que otras personas del sistema sanitario. Antes, durante e inmediatamente después de una intervención quirúrgica, muchos pacientes necesitan una serie de medicamentos, como sedantes, antibióticos y anticoagulantes. Los profesionales sanitarios suelen administrar una dosis incorrecta de medicación, la medicación equivocada o la medicación en el momento equivocado. Estos errores pueden provocar sobredosis, complicaciones e incluso la muerte.

4. No reaccionar adecuadamente ante las complicaciones: Cuando surge una complicación, el cirujano debe reaccionar razonablemente gracias a su formación y experiencia. Sin embargo, si un profesional sanitario no identifica el problema, no reacciona a tiempo ni lo combate adecuadamente, el afectado puede presentar una demanda por negligencia médica. Los cirujanos aprenden a hacer frente a complicaciones como hemorragias y fallos orgánicos en sus años de formación, por lo que usted no debe aceptar ningún fallo de reacción.

5. Cirugía innecesaria: Los profesionales sanitarios suelen presionar a los pacientes para que se sometan a procedimientos peligrosos que resultan innecesarios. De hecho, un equipo de investigación reveló recientemente que hasta el 20 por ciento de las intervenciones de marcapasos podrían haberse evitado. Algunas de estas cirugías innecesarias, como los bypass coronarios y las histerectomías, tienen lugar después de que los médicos interpreten mal los síntomas o interpreten mal las pruebas. Otras se realizan simplemente porque los médicos quieren ganar dinero. En cualquier caso, la cirugía innecesaria conlleva una serie de costes, como facturas médicas, dolor y posibles complicaciones.

Durante el curso de un tratamiento médico, se confía en que los médicos tomen decisiones correctas, y a menudo estas decisiones de una fracción de segundo son la diferencia entre un tratamiento exitoso y lesiones devastadoras. Si un proveedor médico no dedica todo su tiempo y atención a la persona que está tratando, debe ser considerado responsable de las lesiones que cause. Si su vida ha cambiado a causa de un error médico o quirúrgico en un quirófano de Los Ángeles, debe hablar con un abogado especializado en negligencia médica que pueda ayudarle.